Queretaro y sus Pueblos Magicos

Queretaro y sus Pueblos Magicos


¿Qué es un Pueblo Magico?

Un Pueblo Mágico es una localidad mexicana con historia, leyendas, símbolos y atributos culturales que la hacen un destino turístico atractivo. 

Características 

Tiene una población mínima de 20,000 habitantes

Está a un máximo de 200 km de un destino turístico principal

Ha conservado su patrimonio histórico, cultural y natural

Manifiesta su herencia a través de expresiones tangibles e intangibles

Es un lugar que muestra la identidad nacional


Actualmente, en nuestro país existen 132 Pueblos Mágicos


El estado de Querétaro es una caja de sorpresas.

Su papel dentro del Segundo Imperio y la Independencia ha hecho que sea un lugar esencial para entender el pasado de México.

Además, sus paisajes del semidesierto resguardan pueblos que te enamorarán.

Querétaro viene de la palabra tarasca Queréndaro que significa lugar de peñas y está relacionado con su abundancia de cantera rosa.

Su clima es mayormente seco y semiseco; y presenta una temperatura media anual de 28°C.

Cuenta con 7 pueblos mágicos: 


1 Bernal;  De raíces chichimecas y con un encanto que parece resistir el paso del tiempo, Bernal es un Pueblo Mágico que se mueve sin prisa, con calles adoquinadas enmarcadas por colores, aromas y la presencia imponente de su monolito.


Desde cualquier punto del pueblo, la Peña de Bernal domina el paisaje, irradiando un aura de paz y misterio. Es un hotspot para escaladores de todo el mundo y un destino holístico por la energía que emana. El transcurrir del tiempo parece no afectar a los pobladores, quienes viven más años. Muchos misterios están ligados a su peña… Lo evidente es que pareciera un imán que atrae fuertemente, por lo menos, una vez en la existencia.


El motivo

La Peña

Es el tercer monolito más grande del mundo, solo después del Peñón de Gibraltar y el Pan de Azúcar en Brasil.

Se estima que tiene más de 10 millones de años y un peso aproximado de 20 millones de toneladas.

Se cree que la Peña emana una energía especial, brindando vitalidad a quienes viven cerca de ella.

Es casa de biznagas de cien años de edad.

Sus antiguos habitantes, los chichimecas, dejaron vestigios arqueológicos como puntas de flecha de obsidiana y fragmentos de molcajetes.


2 San Joaquín;  Ubicado en lo profundo de la Sierra Gorda de Querétaro, San Joaquín es un Pueblo Mágico donde la historia minera, la naturaleza y la cultura se entrelazan para crear un destino vibrante. Las antiguas ruinas de Ranas y Toluquilla son testigos de su pasado, mientras que sus paisajes montañosos lo convierten en un escenario natural perfecto para la aventura. Pero si algo define a San Joaquín, es su tradición huasteca. Cada abril, el sonido de violines y el repiqueteo de zapatos sobre la tarima anuncian el inicio del Concurso Nacional de Huapango, un evento que ha consolidado a este Pueblo Mágico como la Capital del Huapango.


El motivo

Concurso Nacional de Huapango

Es el tercer festival más importante de México según el Instituto Nacional de las Bellas Artes.

Su celebración lleva más de 50 años y convoca alrededor de 500 bailarines de toda la Huastesca y hasta de Estados Unidos.

Cada presentación es un espectáculo de música, color y pasión que refleja la esencia de la cultura huasteca.


3 Tequisquiapan; uno de los Pueblos Mágicos más encantadores de Querétaro, lo tiene todo: clima templado, plazas llenas de vida, calles empedradas perfectas para recorrer a pie, balnearios para relajarte y mercados de artesanías donde cada pieza cuenta una historia. La experiencia se eleva con su reconocida tradición en la gastronomía del queso y el vino, lo que lo convierte en un destino imperdible. Además, Tequisquiapan ofrece vuelos en globo al amanecer, festivales gastronómicos, catas con enólogos expertos y conciertos íntimos en cavas. Cada visita es una oportunidad para descubrir sabores, paisajes y momentos inolvidables.


El motivo

La ruta del arte, queso y vino

Por su altitud, clima y tierra, Tequisquiapan es uno de los nueve sitios perfectos para el crecimiento de la vid y la existencia de ganado que proporciona leche fresca.

Vinícola Tequisquiapan, Viñedos Paso de Tierra y Bodegas Vaivén son algunos de los sitios de esta ruta que te permiten acercarte a la cultura del vino.

Si lo tuyo es profundizar en la cultura del queso y el vino, el Museo del Queso y del Vino, ubicado en el corazón del pueblo, es parada obligatoria. Además de conocer su historia y maridajes, puedes adquirir botellas selectas o disfrutar de una comida maridada en su restaurante.


4 Cadereyta; es mucho más que la puerta de entrada a la majestuosa Sierra Gorda; es un encuentro perfecto entre el semidesierto y el agua. Aquí, los tonos rojizos de la sierra contrastan con verdes oasis y espejos de agua que invitan a la exploración. Este Pueblo Mágico te sorprenderá con su diversidad de ecosistemas, ideales para practicar senderismo, pesca deportiva o escalada. Además, su riqueza arquitectónica brilla en templos y edificaciones coloniales. No puedes dejar de visitar sus icónicos invernaderos de cactáceas, reconocidos como los más diversos de América.


El motivo

La Presa Zimapán

Es uno de los lugares más atractivos de Cadereyta.

Es el límite natural entre los estados de Hidalgo y Querétaro.

En 1996 se inauguró como una moderna planta hidroeléctrica que usa la fuerza de los ríos San Juan y Tula para generar hasta 292 megawatts por hora.

Casi al centro del embalse de la presa hay un campamento ecoturístico llamado La Isla Tzibanzá en donde se puede pasar la noche en unas hermosas cabañas.

5 Jalpan de Serra; Ubicado en el corazón de la Sierra Gorda de Querétaro, Jalpan de Serra es un destino donde la historia y la naturaleza se entrelazan en un escenario inigualable. Este Pueblo Mágico resguarda el legado de la cultura pame y la herencia franciscana, plasmada en sus impresionantes misiones barrocas, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Pero Jalpan no solo es un viaje en el tiempo, sino también un paraíso natural que invita a la aventura. Ríos de aguas cristalinas, cascadas ocultas, lagos rodeados de vegetación exuberante y senderos que conducen a cuevas y montañas espectaculares hacen de este destino un sitio perfecto para los amantes de la exploración. Su gastronomía, profundamente arraigada en la tradición huasteca, promete sabores únicos que te harán volver una y otra vez.


El motivo

Las cinco misiones franciscanas

Construidas en el siglo XVIII por indígenas pames bajo la dirección de los frailes franciscanos, las misiones de Jalpan de Serra son un testimonio vivo de la evangelización en México. Estas construcciones, con sus elaboradas fachadas de barroco mestizo, fusionan elementos indígenas y europeos en una expresión artística única.

 

6 Amealco En el sur de Querétaro, entre bosques de pino y encino, se extiende Amealco de Bonfil, un destino que conserva intacta su herencia otomí y su espíritu artesanal.

A más de 2,500 metros sobre el nivel del mar, este Pueblo Mágico ofrece un clima templado y paisajes frescos la mayor parte del año.

Caminar por Amealco es hacerlo al ritmo pausado de un pueblo que honra sus raíces. Aquí nacen las famosas muñecas de tela conocidas como Lelé símbolo vivo del trabajo de las comunidades otomíes. En sus talleres, los hilos cuentan historias; en sus cocinas, el maíz, el pulque y el pan conservan los sabores de siempre.


El motivo

Las muñecas de Amealco llamadas Lele, que en otomí significa “bebé", son un símbolo cultural de Querétaro.

Más que objetos decorativos, han sido herramientas educativas para que los niños aprendan a vestir, bailar y asumir roles comunitarios.

Están hechas con técnicas tradicionales usando materiales como barro, fibra de nopal, lana e ixtle.

Lo básico

Acampar en la Laguna de Servín, entre un paisaje de pinos, neblina y silencio, ideal para descansar o caminar por los senderos.



7 Pinal de amoles es un refugio natural en Querétaro, donde la niebla cubre los caminos por las mañanas y la Sierra Gorda despliega su esplendor a lo largo del día.

Este destino montañoso, con su aire fresco y paisajes de cuento, es perfecto para quienes buscan aventura, tranquilidad y una conexión genuina con la naturaleza.


Rodeado de cerros imponentes, cascadas de aguas cristalinas y miradores que regalan vistas panorámicas, Pinal de Amoles es ideal para el senderismo, el ecoturismo y la exploración. Entre su gastronomía, sus tradiciones y su arquitectura colonial, este conserva un encanto rústico que transporta a otra época.


El motivo

Miradores y cascadas de Pinal de Amoles

Puerta del Cielo: el punto más alto de la carretera en Querétaro. Al llegar, la vista se funde con las nubes y la montaña, ofreciendo una de las postales más impresionantes del camino a Pinal de Amoles.

Mirador Cuatro Palos: este mirador a más de 2,700 m s.n.m. tiene una de las vistas más espectaculares de la Sierra Gorda. Recomendado para visitar al amanecer y contemplar el mar de nubes que se disipa con el ascenso del sol, descubriendo un paisaje increíble.

Cascada El Chuveje: es una de las cascadas más altas en México, con más de 30 metros de altura y un río que se convierte en el lugar perfecto para acampar.

Cascada El Salto: para llegar es necesario descender 359 escalones, pero la recompensa es una caída de agua de 35 metros en un entorno verde y sereno, donde el sonido del agua lo envuelve todo.


¿Que esperas para venir a conocerlos?


Información tomada de México Desconocido.